
Hace solo 11 años, los que tiene de vida, el Extremadura UD competía en el fango del fútbol regional entre campos de césped sintético, pueblos perdidos y futbolistas con doble profesión. Apenas una década después, el conjunto de Almendralejo goza de la oportunidad histórica de alargar su estancia en Segunda División a una segunda temporada entre históricos del fútbol español. Los extremeños llegan al tramo final con opciones de salvación, algo impensable para muchos al comienzo del curso.
Entre los casi 34.000 habitantes de Almendralejo y los aproximadamente 378.000 de Las Palmas de Gran Canaria hay más de 300.000 personas de diferencia. La distancia es igual de abismal a nivel de presupuesto. Sin embargo, las dos localidades están representadas, respectivamente, por el Extremadura y Las Palmas en Segunda, y hay posibilidades de que nuevamente se vean las caras también el curso venidero. Vayamos por partes. Los canarios deben tirar de épica para llegar a la zona de ‘play-off’ y luchar por ser aspirantes al ascenso, de ahí que hayan perdido su condición de favoritos para subir de categoría en las cuotas de la Liga en Betfair. Por su parte, los almendralejenses tienen la frontera con la salvación a solo cuatro puntos de distancia, los que les esperan del Real Zaragoza.
Muchos eran los que dudaban de sus opciones, hasta que la llegada de jugadores contrastados como José Antonio Reyes, Casto o Alfredo Ortuño en el pasado mercado invernal cambiaran el parecer de los más escépticos. De alguna manera, el Extremadura UD recuerda ya en espíritu y pundonor al difunto CD Extremadura y cuya desaparición dio lugar a su origen. Su antecesor, también oriundo de Almendralejo, llegó incluso a competir en Primera División. Tal vez sea ese un reto todavía impensable para la nueva versión del Extremadura, aunque no tanto el seguir un año más en el fútbol profesional.
Punto clave ante Las Palmas
Más allá de los fichajes, los resultados dan rayos de esperanza a la afición. Con una victoria, dos empates y dos derrotas en las últimas cinco jornadas, el equipo extremeño es, de los cinco de abajo, el segundo con más puntos cosechados en este tramo de la competición. Son 13 las jornadas que todavía le restan a la temporada regular, por lo que tiempo y puntos quedan como para culminar la remontada. Además, los tres puntos los tiene asegurados en la jornada 30 por el descenso administrativo del Reus, con los que se colocará a las puertas de la jornada 31 con 30 puntos en su casillero y es posible que a uno de la salvación, salvo que el Zaragoza puntúe.
Por delante, el Extremadura tiene otras 12 finales con el Albacete, el Osasuna, el Almería, el Málaga, el Deportivo de La Coruña, el Tenerife, el Zaragoza, el Nàstic, el Alcorcón, el Lugo, el Cádiz y el Mallorca como rivales, y cuatro victorias podrían ser suficientes para alargar el sueño en el fútbol de plata al menos un año más. Últimamente, el bloque extremeño ha crecido y sacado resultados importantes como un empate ante Las Palmas. Falta rematar la faena.